Penitencia: castigo cumplido a cambio del perdón de los pecados. Desgaste del cuerpo por la sanación del alma.
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“Dejó la espada clavada en uno de los arboles que la rodeaban. Si había de terminar todo ahí, no seria de una manera fácil. Habría de dar todo de ella hasta que su ultimo aliento se mesclara con el aire.
-no es fácil encarar tu fin…- se repetía a si misma. Esta vez era diferente a todas las batallas libradas, no habría caras amigas después de la batalla. Estaba completamente consiente que al amanecer del día siguiente, no seria segada por la luz del sol.
Es muy difícil pelear contra los tuyos, gente que se vuelve tu familia cuando tu familia esta ausente, y ante ellos habría de exponer lo que alguna vez fue ese cuerpo. Algo con alma, un ser lleno de ideas.
-Tenemos la costumbre de llorar por lo que paso y sigue pasando, en lugar de evitarlo y hacer algo al respecto-
Vio la luna sobre de ella y al volver la vista al frente contemplo a su ejercito. Lista para la batalla final…”
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Cerré los ojos por unos segundos, sin embargo sentí como si mi vida misma estuviera pasando alrededor mío. Que tantas veces me deje aplastar por alguien…quien camino sobre mi, en que momento me sentí sin armas realmente?...
“Soy una cabrona…” las veces que así sucedió, tuve la fuerza para al segundo siguiente voltear la situación. Mi fama, no fue gratis…entonces que cosa estaba haciendo…
“lo que hiciste no fue noble o discreto…fue una pendejada”…Completamente de acuerdo mi amiga, pero si en el momento no hice nada, mis justificaciones no son para nadie mas que para mi, y si no me parecen entonces no tengo por que seguir con eso.
No voy a romperme a causa tuya, no vales la pena, ni mi tiempo, ni mi esfuerzo…pero hay algo que debe ser completado. No te odio, ni espero que me odies , pero te advierto que no vas a olvidarme…
Abrí los ojos, de una manera tan ligera. Como si se tratara de un sueño consiente. De alguna manera todo en mi mente comenzó a apaciguarse…a veces el miedo nos duerme de una manera tan dominante, pero ciertamente, solo es cosa de despertar. Por difícil que paresca, siempre hay una solución, y si nos concentramos en despertar mas que en mantenernos vivos en el sueño, solo es cosa de mover un dedo y todo estará bien.
Mire al espejo que olvide que tenia enfrente. No soy una persona que se de por vencida tan fácilmente…curiosamente, recordé una canción…
“…cachorro ayer, hoy soy león, ahora la ley la marco yo…”